Pues a mediados de este septiembre estaba yo bicheando la web de la facultad de Antropología de la UGR y di con el departamento de Osteoteca, veo que el responsable es un tal Miguel Botella:
Ese mismo mediodía viendo un programa de EITB «El lector de huesos» también sale Miguel, que resulta que es una eminencia en el campo de la Antropología Física (Catedrático de Antropología Física de la Universidad de Granada, investigador principal de la identificación de los restos de Colón o del príncipe de Viana, actual presidente de la Sociedad Española de Antropología Física) y todavía tiene tiempo para seguir enseñando: cuenta con + de 53 años 😮 de docencia en Anatomía Humana y Antropología Física, y me dije que 2 veces en el mismo día es señal de que debía escribirle para pedirle una entrevista y esa misma tarde me respondió que sin problema.😎
Este verano pasaron por mi casa muchos Couchsurfers de distintos países, una de ellas fue Raquel, mexicana que ha estudiado antropología cultural. Trasteando por la web, acabé en la página de la Fundación Josep Mª Fericgla, escritor y antropólogo social español. Según cuentan en su biografía:
En una salida que hizo para escalar cuando era adolescente, Josep Mª escuchó la descripción que su compañero de escalada le hizo de la ‘antropología cultural’, disciplina científica que estaba vetada en la España franquista. Algo de todo ello le interesó vívidamente a pesar de no entender cuál era el abstracto objeto de estudio de la antropología. En su opinión, el mayor desastre del siglo XX ha sido alejarnos tanto de la Naturaleza y de la espiritualidad perdiendo, con ello, nuestro verdadero lugar en el cosmos.
Fuente: Josep Mª Fericgla
La misma mañana que iba a entrevistar a Miguel, caigo en la cuenta de que él no es antropólogo cultural (que es la carrera que quiero estudiar) sino físico, y que es un poco diferente, claro, por eso estaba todo el rato rodeado de calaveras y huesos.💀💀💀
Miguel tiene un faraónico currículum de investigador, trabaja en Paleoantropología en Egipto, en el yacimiento de época faraónica Qubbet el Hawa (Colina del Viento), Asuán, y en Colombia, México, Perú, Brasil, Chile y demás países de América Latina en Antropología Forense: en identificación de personas víctimas del narcotráfico y conflictos armados.
Documentándome sobre Miguel, llego a una noticia del 2013 de El Diario.es: «El laboratorio de Antropología de la Universidad de Granada, uno de los centros de referencia mundial, ha cerrado sus puertas por insalubridad y riesgo laboral.»
Así que entiendo que parte fundamental de ese laboratorio pasó a ser lo que hoy se conoce como Osteoteca, de la que hablábamos al principio. Aquí tienen la colección más grande y mejor de esqueletos con cerca de 5000 sujetos completos y 500 niños. No existe nada igual en otra parte.
Fuente: El Mundo
A las 9h entro en su despacho, decorado con decenas de objetos estrambóticos: cerámicas antropomórficas, huesos varios, banderas de países de Latinoamérica, un bote de cristal con un feto de 3 meses, cuadros y huevos con preciosos paisajes pintados por él:
Al lado de su despacho cuenta con unas vitrinas donde expone entre otras piezas: momias, cráneos trepanados, el cráneo del famoso cabezón de Gabia.
Un sitio espléndido para pasearse en Halloween.👻
Miguel enseguida te hace sentir como en casa, es una persona muy generosa a la hora de compartir sus conocimientos, una enciclopedia con patas y con un humor chispeante.
Tuve la suerte de poder asistir a una de sus clases sobre Darwin (al que se da un aire😁) y es una maravilla. Ojalá hubiese tenido yo profesores como él, apasionados con su trabajo, humildes y con una pedagogía sabia que solo el paso del tiempo otorga.
💀La entrevista a Miguel Botella
¿Qué libros recomendarías tener en la biblioteca personal?
En este momento, recomendaría «El origen de las especies» de Darwin, ¿Por qué? Porque creo que es el trabajo científico que + ha influido en la humanidad en los últimos 2 siglos.
Ha salido una nueva traducción magnífica este 26 de octubre en Alianza Editorial.
La obra de Darwin es la que rompe el paradigma de que el hombre es el centro de la creación y somos uno más. Copérnico dijo que la Tierra no es el centro del universo y Darwin lo aplica a la biología, y esto es una verdadera revolución.
Quizás ,desde Newton, la influencia + grande en el mundo ha sido la de Darwin.
¿Cómo ves el que podamos editar genéticamente a nuestros hijos?
Todo esto son alteraciones, o deseos o técnicas; pero lo que hace la vida es otra cosa. La vida es la reproducción continua, la perpetuación de los genes, en fin, la vida es algo + sencillo y a la vez, muchísimo + complejo.
Desde un punto de vista científico puede ser interesante, pero teniendo 8000 millones de personas en el mundo, me parece que son alardes absurdos. Nos estamos gastando millones y millones en una cosa pero, ¿qué influye en una población humana de 8000 millones de personas?
Josep Mª Fericgla, antropólogo social, expone en su libro «Ayahuasca» que la falta de sentido trascendente de la vida provoca una situación de neurosis global. ¿Qué te parece?
Me parece una opinión, porque es cierto que el humano busca una trascendencia de alguna manera. Pero una transcendencia por su propia dificultad de aceptarse como es.
Desde el punto de vista físico yo tengo unas experiencias muy frecuentes, en el sentido, de que en cualquier sitio del mundo, cuando yo veo un cadáver, cuando estoy trabajando con unos restos; las familias siempre dicen lo mismo: «Ya está, esto se ha terminado ya. Para esto mi familiar ha sufrido tanto». Y entonces la respuesta que dan es «No puede ser, tiene que haber algo +». La muerte le quita el sentido a la vida.
Estamos buscando siempre algo + porque sino nos da la propia angustia. Nosotros como humanos somos capaces de crear mundos, nos imaginamos nuestra muerte, y claro, ¿qué sentido tiene hacer cosas? Para eso te dedicas a ser hippie por ahí y ya está.
Lo que resulta es que no lo aceptamos y buscamos mundos exteriores y ¿qué puede ser? Pues una fuerza vital de no sé qué, los dioses de no sé cuánto. En fin, en el fondo: la religión, la creamos, precisamente para eso.
Hace poco leí en una entrevista a Carlos Paéz, uno de los supervivientes del avión estrellado en 1970 en los Andes, que su padre le dijo una vez ya muy mayor: «Carlitos, estoy en el viaje al interrogante». Me gustó mucho esa metáfora. La muerte en nuestros tiempos no es algo de lo que se hable a menudo, ¿hablas de la tuya con tus personas + cercanas?
Huimos de eso porque nos da miedo. Por supuesto que he hablado de mi muerte con los míos, si yo no lo tengo asumido ¡quién lo va a tener!
Cuando me preguntan en alguna entrevista si no me da miedo la muerte, al haber visto tantas muertes violentas como estoy viendo ahora con los descuartizados de Latinoamérica, y siempre digo lo mismo, a mí no, pero lo que sí me da miedo es el dolor, es sufrir.
Culturalmente no se habla de la muerte, ¿qué queda de ti luego? Sólo recuerdos y estos son pasajeros y falsos. Cuando tú piensas en algún ser querido fallecido siempre recuerdas lo bueno, el abuelito era muy bueno, pero vamos, el abuelito también hizo algo malo alguna vez en la vida. Bueno, pues eso, se nos olvida. Y de tus padres, ¿tú sabes las miserias o las grandezas que han tenido tus padres? No las sabes. Lo que tenemos es un estereotipo de la persona.
¿Por qué nos acordamos de Cervantes? Por lo que ha escrito, pero, ¿ése era Cervantes? Seguramente no.
El hombre desde sus inicios ha estado en contacto permanente con la naturaleza ¿existe una potencia transformadora en el contacto con la naturaleza y los jardines? Si es así, ¿cómo sucede esto?
El humano por lo menos durante 6 millones de años ha estado en estrecho contacto con la naturaleza y ahora estamos en un mundo artificial, creado por nosotros. Esa necesidad de estar en contacto sigue existiendo, claro.
¿Sin el humor qué sería de tu día a día?
Hombre, sin el mío nada, porque yo me río mucho y gasto muchas bromas y cuento chistes. Pero piensa otra cosa, en mi profesión, el humor es fundamental. Obliga a evadirte de la realidad y la realidad que yo veo es extremadamente dura.
Yo utilizo el humor para intentar escapar, pero la realidad te toca y te muerde.
¿Tienes diario de sueños?
Chuang Tzu soñó que era una mariposa. Al despertar ignoraba si era Tzu que había soñado que era una mariposa
o si era una mariposa y estaba soñando que era Tzu.
––“Sueño de la mariposa”, Chuang Tzu
Yo no. Como todo el mundo tengo sueños muy disparatados. Lo que sí te puedo decir, así pensándolo, nunca he soñado que yo fuera el héroe de nada.
Sueño que me voy con el coche a no sé qué, hablo con una persona…Mis sueños se basan fundamentalmente en las relaciones con la gente, en mis conversaciones, cómo voy a tratar a esta persona. Yo tengo problemas y los pienso y los soluciono por la noche ¡y me va muy bien!
¿Tienes hecho tu árbol genealógico? ¿Sirve de algo o es solo por curiosidad?
Conozco alguna cosa, pero cuando paso de 5 generaciones, ya da igual. Lo primero que tengo, como decíamos antes, es el estereotipo de cómo era mi familia, todos los de mi familia eran buenos, seguramente no, algún asesino malo habría, ¿no? Tú fíjate, una cosa muy curiosa; si tú hablas con la gente, todo el mundo o casi todo el mundo ha tenido un pariente importantísimo: condes, duques, no sé qué.
Y yo le digo a la gente: ¿has visto fotos de Granada de los años 50? Pues tú fíjate bien, el niño con + cara de hambre era yo. Tampoco es cierto, no es que pasara hambre, pero tampoco fui, no solo rico, sino que mi familia fue bastante humilde y yo tuve que trabajar desde los 11 años ¡y no pasa nada! Mi nobleza puede estar en mi trabajo.
Tengo un familiar que hace el árbol genealógico, pero claro, yo no conozco a la mitad. Soy muy descastado.
¿Qué recuerdos de tu niñez conservas con mayor nitidez?
Todo el mundo recuerda la niñez como feliz y no es verdad. Es mentira, nuestro cerebro nos miente, pero siempre la niñez se recuerda con cariño. Si quieres que te diga algo que recuerde, yo recuerdo mi niñez amarilla. La luz era muy bajita y entonces, todos mis recuerdos son amarillos, con una luz tenue. Un olor que me viene es el olor peculiar del colegio, ese olor a mina de lápiz.
¿Qué asignatura te gustaría que fuese obligatoria en los colegios?
Para mí: la evolución. Porque es un concepto de la vida, el concepto de que todo cambia: la variabilidad permanente. Eso le da una visión diferente a la gente. En este momento, estamos todos metidos en cajitas, nuestro conocimiento es muy estándar, desde Descartes o desde Aristóteles.
Ahora nuestra idea cultural y quizá, biológica, es la de simplificar las cosas y todo debe ser estable. En el momento en que tu cambias esa noción, por una noción de cambio permanente, en lo biológico y en lo no biológico, la tierra cambia, el clima cambia, entonces resulta que tu vida cambia también y es por eso por lo que yo metería evolución en la educación.
¿Tienes algún fetiche antropológico?
Yo junto de todo. Mi casa es como mi despacho pero 100 veces +. Mis fetiches son los objetos, porque descargo mis sentimientos en ellos, de esa manera nunca me fallan.
(Puedo dar fe, es un museo antropológico de verdad, no como el de Madrid).
¿Qué cultura o culturas han sido las niñas de tus ojos?
A mí me llaman mucho la atención los nubios.
Yo trabajo con ellos, vamos al sur de Egipto a excavar y vivimos en una aldea de nubios. Yo hago de médico de los nubios, y es una experiencia maravillosa.
Es un pueblo maravilloso, una gente encantadora en la que he visto algo que llama mucho la atención. Ellos son muy pobres, paupérrimos, pero resulta que jamás he visto regañarle a un niño ni pegarle, nunca. El trato con los niños es algo único. Y los viejos son importantísimos, lo consideran muchísimo: en la experiencia, el consejo…
¿Qué significa Granada para ti?
Granada es mi ciudad, es mi ambiente, es mi mundo o mi micromundo donde me refugio cuando vengo de cualquier sitio. Tampoco soy excesivamente chauvinista, yo no considero que Granada es lo mejor que hay en el mundo sino todo lo contrario.
«Hay defectos, enfermedades y trastornos que pueden desempeñar un papel paradójico, revelando capacidades, desarrollos, evoluciones, formas de vida latentes, que podrían no ser vistos nunca, o ni siquiera imaginados en ausencia de aquéllos. Es la paradoja de la enfermedad, en este sentido, su potencial creativo». Oliver Sacks. ¿Qué opinas de este gran doctor, neurólogo, investigador apasionado e incansable?
Siempre nos decían en la Facultad de Medicina que la enfermedad humaniza a la gente. Te hace bajar a la tierra. ¿La enfermedad paradójica? Pues sí, tu fíjate, la enfermedad en el cristianimo se interpreta como un castigo. Acuérdate del SIDA, es porque eran malos porque eran homosexuales, por eso dios los castiga.
Y sin embargo, en América prehispánica, en México, los enfermos eran los bendecidos por los dioses, de tal manera que a los sifilíticos los enterraban delante de los templos como seres privilegiados.
Al mismo tiempo, una enfermedad paradójica, un cáncer, es una enfermedad que hace ver cómo funciona una sociedad. En nuestro caso, hoy, el enfermo se le atiende en un hospital y normalmente, el enfermo muere en el hospital.
Pero cuando yo encuentro unos huesos, por ejemplo con un cáncer de mama, que he encontrado en Egipto, ves que esa persona ha necesitado unos cuidados de su sociedad, de su gente, que le han tenido que dar cariño, comida, lo han tenido que cuidar, limpiar… Lo cual habla mucho de una sociedad.
Y nosotros lo estamos invirtiendo, nosotros lo llevamos al hospital para que lo cuiden, para que lo limpien.
Mira, yo tuve un caso en Nubia, donde a mí me llamaron. Era un hombre que tenía un problema con el azúcar y se murió. Entonces el hombre estaba ya moribundo y me llevaron ahí a una choza. Estaba el hombre viejo, sentado en una silla, moribundo, babeando. Y si tú vieras al hijo, limpiándole con qué cariño: «Baba, baba” (papá)- le decía y le limpiaba y le limpiaba, y lo abrazaba y lo besaba. Joder, eso se nos ha perdido a nosotros. A la enfermera le decimos: «Cuídelo usted, límpiele usted las babas”.
Hemos cambiado y para mal en ese sentido.
💀Os dejo una charla TED para que sigáis disfrutando de Miguel:
💀Otro artículo muy interesante publicado en El Mundo (2016) sobre la labor de Miguel: Miguel Botella, el detective de los huesos humanos.
➡Si quieres conocer a gente con oficios interesantes, aquí tienes la entrevista a otro Miguel: Miguel De la Rosa, el último sombrerero de Granada.